La historia por la defensa y conservación del valle, río y montañas de Cochamó se remonta a décadas de diversos esfuerzos. Uno de los mayores desafíos data del año 2009, cuando se crea la agrupación ciudadana no gubernamental Conservación Cochamó (2009-2012) para confrontar un proyecto hidroeléctrico que quería explotar el Valle Cochamó y sus principales tributarios. La organización junto a la comunidad logra la reserva de la cuenca del Río Cochamó para la conservación y el desarrollo local por un decreto presidencial durante el primer gobierno de Bachelet.
Aun así, las amenazas al río Cochamó y Puelo nunca cesaron. Grandes empresarios con afanes inmobiliarios y con proyectos de centrales hidroeléctricas siguen hasta el día de hoy tratando de intervenir estos lugares de belleza única y con un alto valor de conservación. En el Valle Cochamó hay 6 mil hectáreas de Alerce, especies endémicas, tanto de flora y fauna, como la ranita de Darwin, vizcachas patagónicas, pumas y otras especies típicas del bosque templado o selva valdiviana.
Es por eso, que el año 2017 vecinos, propietarios, operadores turísticos, arrieros, escaladores, amigos y colaboradores extranjeros para crear la Organización Valle Cochamó, con el objetivo de desarrollar un turismo responsable y sostenible, creando un área protegida, colaborativa y voluntaria para la conservación del patrimonio natural y cultural de este destino internacional. También en USA se crea la organización Friends of Cochamó, integrada por escaladores que han querido ayudar con los esfuerzos de conservación locales.
Vemos fundamental y con urgente la protección de este lugar: los esfuerzos que se requieren son enormes, tanto humanos como financieros, sobre todo cuando las amenazas de la construcción de un camino al valle (por los mismos empresarios que destruyeron el bosque en el Manso) son cada vez más cercanas.
Este lugar es conocido como el Yosemite de Sudamérica, es una comparación que está a años luz de lo que se está haciendo y conservando aquí; es justamente en lo que no queremos convertirnos, solo imagínense lo que sería el Valle Cochamó transformado en un estacionamiento.
Pensamos que lo único que necesitamos para cuidar la naturaleza es dejarla tranquila y ayudar a su restauración y conservación, sobre todo de lugares tan prístinos como el Valle Cochamó. Esto nos ayudará también en otro de nuestros objetivos, cuidar el tesoro que significa la cultura ancestral gaucha que hoy existe en el lugar. Con un camino se acaban los pilcheros, y se termina de raíz con la forma de vida de los arrieros, con un impacto social y cultural catastrófico e irreparable.
Es por eso que necesitamos de tu ayuda en la protección de este lugar, somos todos responsables de seguir teniendo un Valle Cochamó libre, sano y conservado a las futuras generaciones.